Siempre que se tenga la más mínima duda sobre el hecho que ha provocado la multa, el recurso va proporcionar disponer de una defensa para hacer justicia y huir así de la idea del ánimo recaudador a la DGT.
A continuación vamos a ver las situaciones en las que un recurso tiene más probabilidades de tener éxito.
Errores en los márgenes de velocidad
Las multas de tráfico por exceso de velocidad son las más comunes y, aunque se tenga la creencia que son las más difíciles de recurrir no tiene por qué ser realmente así.
En la UE no existe ningún radar cuyo margen de error sea del 0%, por lo que siempre habrá que fijarse en el radar que nos ha 'cazado' y comprobar su fiabilidad mediante un informe. También, por ejemplo, el hecho de que la matrícula aparezca borrosa jugará en nuestro favor para reclamar la multa con éxito:
Defecto de forma
Por defecto de forma se entiende los errores más habituales que se encuentran en las multas y que se corresponden con faltas en los datos básicos, tanto del vehículo como del autor de la sanción.
Estos afectan al DNI, la matrícula, el coche, color, modelo u otra información que no aparezca correcta en la sanción. Si cualquiera de estos datos es erróneo, la multa podrá ser recurrida con éxito.
Falta de información
Si estamos ante una situación en la que se nos multa y esta implica pérdida de puntos pero el agente en ningún momento nos ha informado de ello, dicha falta de información puede llevar también al éxito en el recurso.
Caducidad de las multas
Las multas de tráfico tienen fecha de caducidad. Si una infracción no ha sido publicada en el BOE o comunicada por Tráfico en los plazos previstos en función de su gravedad, quedará exento del pago. Cuando esta se reciba, restarán 20 días para interponer un recurso.
¿Cuándo podrá librarse de la multa?
- Comunicación fuera de plazo
Por ley, la Administración tiene tres meses de plazo para comunicar al infractor las sanciones leves (estacionamiento limitado), seis meses para las graves (hablar por el móvil) y hasta un año para las muy graves (sobrepasar en más del 50% el límite de velocidad).
Por lo tanto si se comunica tarde se podrá alegar que han prescrito y no habrá que pagarlas.
- Cobro de la sanción fuera de tiempo
Tanto la DGT, como los Ayuntamientos, disponen de un año, desde que la sanción es firme, para iniciar el proceso de cobro de la multa. Si incumplen dicho plazo, ya no podrán hacerlo porque la sanción habrá prescrito.
- Presunción que es usted el culpable
Si no le pararon en el momento que cometió la infracción y le remiten la sanción a casa, por ley, lo primero que debe recibir es la solicitud de que identifique al conductor, a veces, esta petición se incluye en la multa que se recibe. De no llegarle dicha petición, el ayuntamiento presupone que el titular del vehículo es el infractor, por lo que se puede recurrir solicitando que anulen la sanción por 'atribución arbitraria de responsabilidad'.
- Multa con datos incorrectos
Se debe corroborar muy bien si en la sanción aparecen correctamente los datos del vehículo (matrícula, marca, color..) así como el momento y lugar exactos de la infracción.
- El agente que puso la sanción no se ratifica en su versión
Si le han puesto una multa, puede recurrirla solicitando las pruebas que le incriminan. En algunas sanciones, lo único que le inculpa es la palabra de un agente que tiene que corroborar su versión de los hechos en un nuevo informe.
En muchos casos, el agente no llega a ratificar su versión, normalmente, por extravío del expediente; o no lo hace en el tiempo adecuado y, entonces, la multa 'caduca'.
- Todas las multas deben ser 'iguales' y no lo son
Todas las sanciones cometidas en idénticas circunstancias tienen que sancionarse siempre con la misma multa.
Además de los recursos en vía administrativa, no hay que perder de vista la impugnación de multas en vía judicial, donde se obtienen muy buenos resultados de anulación, consecuencia de la indefensión creada al interesado por la arbitraria tramitación del expediente. En vía judicial, actualmente, las persona físicas quedan exentas del pago de la tasa judicial, circunstancia que abarata los costes de acceso a la justicia.
En cualquier caso es recomendable acudir a profesionales cuando se trata de multas de tráfico para la tramitación del expediente, la ayuda de un experto en la materia proporcionará una mejor defensa.
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