Aproximadamente el 7% del parque móvil de España carece de seguro, algo que no sólo repercute a quien conduce sin seguro, sino a quienes sí pagan su póliza.
Según los últimos datos publicados por la DGT, el parque móvil global del país ascendía a 31,02 millones de vehículos. Si cruzamos estos datos con los recogidos por el Consorcio de Compensación de Seguros en el Fichero Informativo de Vehículos Asegurados (FIVA), en el que, a finales del pasado año había 28,80 millones de automóviles, arroja una diferencia de 2,2 millones de automóviles que no tendrían ningún tipo de seguro.
Hay que aclarar que aquí se incluyen vehículos que no necesitan seguro para su circulación, por el uso al que se destinan, coches que no se utilizan, y que no se han dado de baja, o vehículos que ya no circulan por España.
Como hemos comentado en otras ocasiones todos los vehículos, cuyo estacionamiento habitual esté en España, tienen la obligación de estar en disposición de un seguro de Coche en vigor que debe ser, como mínimo, el de Responsabilidad Civil (RC). Sólo están exentos de esta obligación los coches que estén dados de baja en el Registro de Vehículos de la Dirección General de Tráfico, ya sea de manera habitual o definitiva.
En consecuencia, no contar con un seguro en vigor puede acarrear más de un problema de los que vamos a ver a continuación:
Riesgos de carecer del seguro de Coche
Prohibición de circular
EL Real Decreto Legislativo 8/2004, de 29 de octubre, que aprueba la Ley sobre Responsabilidad Civil y seguro en la circulación de vehículos a motor advierte a todos aquellos que estén en posesión de un vehículo que no esté asegurado que tienen prohibida la circulación dentro del territorio nacional. Lo que el usuario tiene que tener claro es que conducir sin seguro no es sólo un acto imprudente sino que se trata de una ilegalidad.
Sanción económica
Uno de los riesgos a los que se expone la persona que circula con un vehículo sin seguro es el de ser sancionado. La legislación actual establece que la multa entre los 601 y los 3.005 euros. La cuantía será menor o mayor dependiendo de:
- Si se estaba conduciendo el vehículo en el momento en que fue impuesta la multa.
- El tiempo que llevaba el coche sin estar asegurado. No se impondrá la misma sanción si el coche llevaba 2 días sin seguro que si llevaba 3 meses.
- Si ha habido reincidencia, es decir, si se había cometido más veces la misma infracción.
La gravedad de los hechos. - La categoría y el servicio del vehículo.
Inmovilización del vehículo
No tener un seguro en vigor no puede derivar sólo en una sanción económica, también puede suponer la inmovilización del vehículo por parte de cualquier agente de la autoridad por un periodo de tiempo que puede ir desde 1 mes hasta los 3 meses, si ha habido reincidencia por parte del amonestado.
El tiempo de inmovilización puede dispararse hasta un año si ha habido “quebramiento del depósito. Al final de éste, el sancionado deberá acreditar que se está en disposición de un seguro en vigor.
Además, el depósito del vehículo es con cargo a su propietario, es decir, será él quien tenga que hacerse cargo de los gastos originados como consecuencia de éste que como requisito para recuperar el vehículo deberá abonarlos, o bien, garantizar su pago.
Plazo para justificar la existencia del seguro
De no ser así, se ordenará “el inmediato precinto y depósito del vehículo”.
Daños ocasionados
En el caso de que un coche sin seguro se vea involucrado en un accidente de tráfico será el conductor el que tenga que responder ante los gastos ocasionados. Si el cliente no ha pagado la póliza actual la aseguradora no estará en la obligación de cubrirlo.
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